Describir nuestro instrumento musical preferido a través de un poema con formato de soneto.
¡A crear!Resultados:
Acaricio abstraído la madera,
marrón, oscura y bella de mi flauta;
para hacerla sonar no tengo pauta,
pues termina cantando a su manera.
No se piensen que es siempre la primera.,
es que a veces me siento un argonauta
al ver que un día se me pone cauta:
y hace empezar a la guitarra austera.
Sin pensar, pienso siempre que no puedo,
encontrar el sonoro velloncino
y sepan que lo busco con denuedo.
Pero soplando encontraré el camino
que me saque algún día de este enriedo
y ese buen día, sonará el destino.
Hastiado me soporta el taburete,
y el atril mnemotécnico ejercita,
buscando que sonidos se repitan.
me preparo a luchar con mi juguete.
Frente a escalones mi piel arremete,
limpias divisiones pero infinitas.
Las blancas suceden, las negras gritan:
galopan melodías sin jinete.
Pero despierto, aunque mis sueños muerda,
porque cerrada la tapa y mis manos
ignoran aún al fieltro y las cuerdas.
Desconozco sus secretos tiranos,
impotentes la derecha y la izquierda.
Mudo, enviadiado y vacío, mi piano.
Lo difícil es el saber besarte…
tu cuerpo de cobre deseo explotar
hasta tu mismo aire quiero respirar
y así cada sentimiento brindarte.
Porque estoy ciego sin tu lenguaje
danzando perdido en esta oscuridad
imaginando acariciar la humedad
de tu múltiple mejilla salvaje.
Me arrastrará tu sinfónico caudal
removiéndome del mundo-desastre,
desembocando en lo sublime y abismal.
Eres mi cisne dorado y sensual
adoro, el agudo y ronco arrastre
de tu dulce melodía celestial.
Soneto Musical
Tus garras escalan sus entrañas,
trepas por la laringe y te arrojas
a la roja cueva donde te bañas,
y con prisa en sus puertas te deshojas.
Cada átomo que en el aire apuñalas
se viste de voz en tu recorrido.
Fiera, ondulante y aguda te instalas,
como insecto en el fondo de mi oído.
Pasa, que cada vez que abre la boca
la muy negra Aretha te vuelve a parir.
¡Y hasta Dios baja a bailar como loca!
Sueño contaminar de voz mi aliento,
vomitarte hermosamente hasta morir.
Voz , el humano y sagrado instrumento.
